En 1955, año en que comienza a ser utilizado el nuevo colegio, el Grupo Escolar contaba tan sólo con 8 aulas, 4 para niños y 4 para niñas.
Pero la educación fue evolucionando y la demanda de espacios fue haciéndose palpable. La matrícula del colegio fue aumentando, y a partir de 1965, fecha en que se marcharon las religiosas carmelitas, se tuvo que hacer frente a la escolarización de toda la población en edad escolar, de 4 a 14 años, de la localidad. (En esos momentos, la asistencia era obligatoria bajo pena de multa a la familia.)
El Ayuntamiento utilizó el antiguo colegio de Carmelitas para recoger al alumnado de párvulos y de 1º, así como el intervalo 12 – 14 años, tanto de niñas como de niños (que en esos momentos no compartían espacios, encontrando clases de niñas y clases de niños.)
Con la nueva ley de Educación de 1970, se instaura la obligatoriedad de crear clases mixtas, de niños y niñas, así como de establecer niveles por edades, sin mezclarlas salvo excepciones. De este modo, el Ayuntamiento se plantea una ampliación del grupo escolar; tomando para tal fin un camino de ovejas que pasaba delante del colegio, enlazando con la calle César, y una parte del terraplén de subida al parque del Romero. (El edificio y terrenos de Carmelitas se iban a destinar a instalaciones deportivas y piscinas, así como a Plaza de Toros.)
Pero un gran acontecimiento sucede durante la excavación del terreno, justo debajo del terraplén: una excavadora patina y chirría al tropezar con algo duro. De esa manera son descubiertos restos arqueológicos correspondientes a una casa romana datada entre los siglos I y III d.c.
Las obras se paralizan durante bastante tiempo, pero tras mucho negociar, el mosaico romano encontrado es trasladado al Museo de Navarra y las obras pueden proseguir. (Las fotos han sido cedidas por el Museo de Navarra.)
Así se construyen 8 aulas más, que pasarán a ser las de «Segunda Etapa». También se aprovecha para ampliar el antiguo edificio con una cocina y comedor y 2 nuevas aulas encima.
El nuevo edificio, separado del anterior, se inaugura en 1974. El colegio comienza a ser comarcal, viniendo gente de Barillas, Tulebras y Monteagudo.
Más adelante, en 1980, se hace necesaria una nueva ampliación para dotar al Centro de: Biblioteca, Sala de Audiovisuales y Usos Múltiples, Laboratorio, Sala del Profesorado… y cuatro aulas más. Así, los dos edificios que antes se encontraban separados son unidos mediante una construcción en forma de L.
Así llegamos al momento actual, éste es nuestro colegio. (Probamos a unir las tres partes del rompecabezas…)
Finalmente, la última ampliación se inauguró en el año 1998. Tras muchos años de solicitud de un gimnasio escolar, éste se materializó en un polideportivo escolar y municipal que se construyó utilizando una parte de los patios del colegio y unos edificios colindantes, excavando el terreno, pero respetando siempre el frontón escolar.
Ello permitió dotar de polideportivo con gradas, duchas con vestuarios y otros pequeños espacios. La parte superior, encima del polideportivo, siguió siendo aprovechada para patio escolar.